"Y cuando Dédalo, con toda su sabiduría e inteligencia, ufano de su gloriosa ciencia,
vio bajar el sol, descubrió su sombra, negra, aciaga, creciente, voluptuosa, y
entonces entendió que él también estaba allí."

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domingo, 6 de mayo de 2012

VANAGLORIA


José Antonio Nisa
“Llevo cinco días haciendo una y otra vez un test para ver si soy un genio y, no comprendo muy bien por qué, en cada ocasión compruebo con una pena atroz, que estoy muy por debajo de la media de los que aspiran a ello. Sí, lo reconozco, no soy un genio. Pero, ahora que lo pienso más detenidamente, esto me alivia, pues debe suponer una gran responsabilidad eso de ser un genio, y aún más, quizá un compromiso con uno mismo: tener que demostrarse continuamente que uno es de una clase A, tanto más cuando ya, por mano de la vanidad del diablo, ha despreciado a los de la clase B, es algo terrible. Exige una tarea ardua y penosa, un trabajo pacato y minucioso, un trabajo... Ay, esto del trabajo me trae el recuerdo de don Honorio, con su voz potente, arengándonos con aquellas palabras mayores, a nosotros tan jóvenes: “la voluntad es lo único que nos hace hombres”, decía. Vaya bobada. Y es que el pobre era todo un moralista: “La mayor aspiración que debe tener un hombre es la capacidad de dirigir sus impulsos irracionales…”
Y bien, tal vez fuera verdad todo aquello que él decía. Pero en fin, el caso es que no soy un genio. Es lo que quiero decir, y más bien soy débil y etéreo, sin demasiada confianza en lo que hago, soy... ¿cómo diría? Un “artista”. Sí, eso es, reúno todas las cualidades, soy un artista. ¿Un artista de qué? ¿De qué? Pues, soy, un artista de mí mismo. Me creo a mí mismo, a este ser que soy, este hombre que aquí está frente a ustedes, grande y hermoso por dentro, enorme ser humano capaz de hablar con la clarividencia que hablo ahora.
Y ¿quieren saber un secreto de artista? Resulta que, para mí, el momento más jovial del día es cuando, al levantarme y mirarme en el pequeño espejo redondo que hay en el oscuro cubículo del baño, compruebo que mi cara no ha cambiado nada y que, felizmente, sigo siendo el mismo gran artista de siempre.”

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